SEGUNDA PARTE. COMPRENDE LO OCURRIDO EN ZARAGOZA Y PUEBLOS DE ARAGÓN DESDE 1º DE SEPTIEMBRE DE 1808 HASTA EL 21 DE FEBRERO DE 1809.
INTRODUCCIÓN.
En el segundo sitio, que voy a describir, ejecutaron los defensores acciones muy gloriosas, y dignas de trasmitirse a la posteridad. Aunque el cuadro versa sobre un mismo asunto, contiene escenas enteramente distintas. Empeñados los unos en apoderarse de Zaragoza, y los otros en defenderla, sin la lectura de esta historia, no cabe formarse idea de sus respectivos esfuerzos. Aprestos militares; obras extraordinarias; reunión de fuerzas superiores a las que parece exigía el ataque y defensa de una ciudad sita en una llanura, sin muros ni fuertes; obstinación y sufrimiento a toda prueba; los choques sostenidos en las casas; su conquista gradual; la guerra subterránea; la epidemia; todo ofrecerá motivos de sorpresa y admiración a cuantos sientan arder en su seno el fuego que inspira el amor dulce de la patria y la idea grata de sostener su independencia. Es imposible leer tan singulares acontecimientos sin experimentar sensaciones vehementes. Las refriegas que, sin olvidar la exactitud propia de una narración fiel y circunstanciada, se detallan y exornan, no podrán menos de identificar a todo español con el entusiasmo de los defensores, y hacerle tomar un vivo interés por su situación y padecimientos.