96
Se supo: Jack Bauer mató a Osama Bin Laden
Pero hay algo más. Osama Bin Laden fue asesinado en mayo de 2011. La serie de Jack también concluyó en mayo, pero de 2010. Un año antes de la muerte de Osama. Los admiradores de Jack han sacado sus conclusiones. ¿Dónde estuvo Jack durante todo ese largo año? ¿Dónde estuvo entre mayo de 2010 y mayo de 2011? Sólo hay una respuesta: buscando a Osama. ¡Lo encontró!
Osama Bin Laden ha muerto, Jack Bauer lo ha hecho.
Publicado el 2 de mayo de 2011 por Arcibel:
«Todo el mundo lo sabe. Fue noticia de domingo por la noche. Estados Unidos anunció el asesinato de su máximo enemigo, Osama Bin Laden. El gobierno lo buscó, lo encontró (diez años después) y lo asesinó a su manera, tal como estamos acostumbrados a ver en las distintas series que tratan esta temática y obviamente si hablamos de series y de terrorismo es imposible no hacer referencia al gran Jack Bauer y su lucha constante proyanqui. Hace un año se fue Jack Bauer, terminó 24 y una época de lucha contra el terrorismo en las series de televisión. Si hubo una serie que mostró este tipo de lucha contraterrorista fue 24, y así la recordamos, más aún hoy luego de enterarnos del asesinato de Osama Bin Laden en Pakistán. Osama ha muerto y Jack Bauer, el personaje de ficción más querido de los últimos tiempos, respira en paz y todos sus compatriotas, gorditos y con poco cerebro, también. Ahora sabemos lo que Jack Bauer ha estado haciendo desde mayo de 2010. Te extrañamos Jack, hoy más que nunca».
El texto es irónico y agresivo. Califica brutalmente a los fanáticos de la serie. Son «gorditos y de poco cerebro». Pero eso no le importa a Murdoch. Así es como él los quiere. 24 no se ha hecho para desarrollar la inteligencia de nadie. Menos aún es una receta para bajar de peso. Se ha hecho para que todos sean cada día más tontos, más torpes, más insensibles y terminen por aceptar lo inaceptable: que es lícito vejar a un ser humano, destrozarlo en vida. Por desgracia para la causa de los derechos humanos, 24 es adictiva. Cada capítulo pasa en un día. Cada día lleva al siguiente. Y el espectador ahí está, día tras día, siguiendo a Jack Bauer, ansioso, porque alguien ha puesto una bomba nuclear en la ciudad de Los Ángeles y Jack Bauer tiene que atrapar, por medio de cualquier recurso, o por medio del más eficaz: la tortura, al culpable o morirán millones de personas. ¿Qué duda puede haber? ¿Quién, que no sea un enemigo declarado de America, puede ignorar de qué lado está la verdad? America es la civilización. Es el Occidente cristiano. Es la razón imperial que hereda la tradición de los ingleses, de los franceses. El Mariscal Bugeaud, el conquistador de Argelia, amigo de Sarmiento, quemó vivos a 500 argelinos. Le dijo a Sarmiento:
—Así sabrán que nada va a detenerme. Vea, amigo, a la barbarie hay que combatirla con la barbarie. Aunque nosotros seamos el espíritu de la Civilización. Aunque la razón y la cultura se encarnen en nuestras acciones. Si para defendernos, o si para llevar los valores del Espíritu a los territorios salvajes debemos dejar de lado cualquier dimensión de humanidad, lo haremos.
Sarmiento aprendería la lección. El Occidente capitalista, la razón imperial, siempre que fue necesario dejó de lado las leyes de la guerra y aniquiló a los bárbaros con métodos bárbaros, pues los ubicó «fuera de la ley de gentes» y todo, después, fue sencillo. Mitre se lo dice a Sarmiento en una carta. Ya llegaremos a eso. Jack Bauer, en suma, es el espíritu combativo del Occidente capitalista, de la racionalidad imperial. Esa racionalidad se expresa en la tortura. A la que —como varias veces hemos dicho— no en vano se la llama «trabajo de inteligencia». La tortura es la racionalidad en acción. La razón imperial encuentra su aplicación más estrictamente científica, matemática, premeditada, en la tortura. Era hora de decirlo. No es la primera vez que se dice. En todo caso, nunca dejará de ser hora de seguir diciéndolo.