Buenas noches
Pone el despertador, se quita las gafas. Las bragas que había esta tarde en la cama ¿son tuyas? Claro, ¿de quién iban a ser? Alarga la mano y apaga la luz. No te enfades, pero parece que no tengamos dinero para comprar bragas. Cabrón, piensa. Tienes razón, pero me da pena tirarlas solo porque hayan cambiado de color. ¿Y en qué año dices que pasó eso? Él no puede verla, pero ella está aguantando la risa y piensa que es la conversación más larga que han tenido en los últimos meses. No te preocupes, mañana las tiro. No es solo el color, es el modelo, las bragas de ahora no son así. No sabía que fueses un experto. Bueno, no estoy ciego. Él se arrepiente y cierra los ojos. La oscuridad es la misma. La vida sigue, las putas pasan, piensa ella. No te preocupes, mañana las tiro.