CAPITULO ONCE

No había números bailando en sus sueños, pero había arcoíris y extraños bebes alados. Cuando los bebés alados empezaron a zumbar como avispas y a formar como un enjambre, Eve salió de las garras del sueño. Se sentó como si sus hombros fueran muelles y dijo. –Whoa

-¿Pesadillas? Roarke ya había pasado de la cama a la zona de estar

-Bebes volando. Demoniacos bebes volando con demoniacas alas

El se acercó a la plataforma y se sentó en el borde de la cama.- Querida Eve, necesitamos unas vacaciones

-Había globos, dijo sombríamente y por lo que me parecía, las alas cortaban a través de ellos como maquinillas de afeitar. Y cuando explotaron, más alados bebes demoniacos aparecieron zumbando

El pasó un dedo a lo largo de su muslo. –Tal vez podrías hacer un esfuerzo para soñar, oh, digamos sobre sexo

-Alguien tuvo relaciones sexuales, ¿No es así como crearon esos demoniacos bebés alados? De pronto ella se echó hacia delante agarrando fuertemente su suéter. La desesperación irradiaba de sus ojos. No me dejes sola hoy con todas esas mujeres

-Lo siento, caemos de nuevo en la cláusula del pene. Que suena vagamente obsceno cuando se dice en voz alta, pero que voy a utilizarla en cualquier caso. Y no admite negociación

-Bastado, dijo ella, pero más con envidia que enfadada, ya que lo soltó y se echó hacia atrás

-Vale, vale, él le dio unas palmaditas ausentes

-A lo mejor nieva. Podría haber una tormenta de nieve y la gente no sería capaz de venir porque sería la gran madre de todas las tormentas de nieve que haría a todo New york ponerse de rodillas

-La predicción es de máximas de veintidós grados con cielo despejado

-He odio eso. Lo he oído. Ella se levantó de nuevo pinchándolo con un dedo. No las palabras. El tono. Piensas que esto es divertido

-No, se que lo es. Y acabarás pasando un buen rato, en primer lugar porque Mavis estará feliz y segundo porque pasaras algún tiempo no profesionalmente con mujeres que te gustan

-Pero Roarke, va a haber juegos

-No tienes porque jugar

Sus ojos de policía eran planos. -¿Por qué no?

El no la ayudaría si la dejaba ver que le hacía gracia. Ella se las había arreglado para parecer presa del pánico e incrédula al miso tiempo.- Eres la dueña de la casa y estaría mal que participaras en alguno de los juegos y ganaras alguno de los premios

-¿Eso es verdad?

-Podría serlo, y esa es la posición que puedes adoptar

-Sí, esa es mi posición al respecto. Ella se animó considerablemente. Gracias.

Ella se dio fuerzas con un poco de ejercicio, un largo baño y una ducha caliente. Luego se metió en su oficina para ejecutar las probabilidades de los diferentes escenarios

-¡Ya estás trabajando otra vez!

Ella dio un respingo y sintió una pequeña culpa. ¿Qué eres, le preguntó a Peabody, la policía del trabajo policial?

-No necesitas un policía, necesitas un portero. Dallas, el servicio de catering va a llegar en cualquier momento

-Bien, bien, bien. Alguien me lo puede decir cuando lleguen. Eve hizo un gesto con la mano. Solo voy a comprobar algunas cosas que tienen que ver con molestos detalles como un doble asesinato

Pero apagó el ordenador cuando Peabody simplemente siguió de pie, mirándola fijamente, dando golpecitos con el pie. No eres la poli del trabajo de policía, dijo con cierta amargura, Eres la fiesta de la Gestapo

-Mavis acaba de llamar. No trató de localizarte en tu enlace porque sabía que estarías ocupada con los preparativos de la fiesta. Está encamino porque ya no puede esperar más

-Hombre. He apagado el ordenador ¿verdad?. Voy a dejar la oficina. Mira, salgo, cerrando la puerta detrás de mi

Peabody se limitó a sonreír. Sabía que la culpa era la mejor herramienta, lo sabía. Lo había aprendido en las rodillas de su madre

La primera sorpresa de Eve, fue que el del servicio del catering no quería que ella hiciera nada. De hecho quería a Eve y a todos los demás fuera de su camino. La segunda, que Summerset ya se había ido de la casa, y no estaría de vuelta hasta el día siguiente

-No encontrarás ningún cromosoma Y en las cercanías esta tarde, le dijo Roarke, al menos que sea el gato

El estaba junto a Eve en el segundo nivel de la sala de estar. Era más grande que el salón de la planta baja que se utilizaba más a menudo, y tenía chimeneas dobles con bordes de malaquita. Sofás, sillas y una gran cantidad de almohadas estaban organizadas para mantener conversaciones, con una larga mesa , cubierta ahora por un arco iris de telas y velas, y algún tipo de flor artística de vidrio fluía de un círculo brillante y formaba una especie de dosel sobre lo que Peabody había designado la mesa de los regalos

Rosas enanas, iris enanos, gypsófilas (tipo de flor)- y otra variedad de ramilletes de flores enanas -que Eve realmente había olvidado cómo se llamaban-se derramaban fuera de las cestas de plata con forma de cuna.

Las mesas del buffet, también con tonos del arco iris, ya estaban montadas. El servicio de catering había utilizado una vajilla que pegaba con la gama de colores, más velas en miniatura, más flores y una escultura de hielo de una cigüeña llevando un saco en el pico

Eve había estado segura de que sería una tontería, pero en su lugar era algo encantador.

Ambas chimeneas ardian a fuego lento, y en el centro de todo ello el balancín tapado con una tela multicolor y adornado con flores

-Creo que se ve muy bien

-Muy dulce. Roarke tomó su mano. Muy femenino. Enhorabuena

-No he hecho demasiado

-Eso no es verdad. Has arrimado el hombro en cada oportunidad que has tenido, los recogiste e hiciste el trabajo. El se llevó las mano a los labios, a continuación se inclinó para besarla

-Uy, Peabody se detuvo en la puerta y sonrió. No tengais en cuenta la interrupción si la cigüeña y todas las cunas os están dando ideas chicos

-No me hagas hacerte daño. Advirtió Eve

-Ya está Mavis aquí. Pensé que te gustaría enseñárselo todo

-¿El embarazo ha afectado a su vista?

-No, yo solo- no lo he pensado, dijo Peabody con una sonrisa. Okay, Mavis

Ella podía llevar un sobrepeso de veinte libras, pero Mavis seguía pegando botes. Ella botaba por toda la habitación en sus botas de aire de color rosa que le llegaban hasta más arriba de las rodillas. Su falda azul y blanca ondeaba como pétalos de flores debajo de la pelota de baloncesto de su vientre. Las mangas de su vestido llevaban unos dibujos geométricos en color que le llegaban como puntos hasta la parte trasera de las manos. Su pelo hoy era de un suave y pálido rubio recogido en una larga y sinuosa coleta que rebotaba como lo hacía ella.

Ella se detuvo y se llevó las dos manos a la boca. Y se echó a llorar

-Oh mierda, mierda, era todo lo que Eve podía manejar

-No, no, no. Todavía llorando, incluso cuando Leonardo corrió hacia ella, Mavis agitó sus manos. Estoy sorprendida. Soy una víctima total de las hormonas. ¡Es tan bonito! . Oh ,oh es todo un arco iris y flores. Es magnífico. Es genial, Dallas

Ella sollozó en su camino a través de la habitación y se arrojó sobre Eve llegando su vientre en primer lugar

-Bueno, bueno, entonces me alegro que te guste

-Lo adoro. ¡Peabody! Mavis alargó una mano y tiró de Peabody hacia ellas convirtiendo el abrazo a tres bandas. Gracia. Gracias

-Tal vez deberías sentarte

-No, estoy bien. Solo lloro de vez en cuando. ¿No es así mi pastelito dulce?, le dijo a Leonardo

-Comimos zanahorias enanas ayer por la noche. El realmente estaba dándola pañuelos. Lloró durante diez minutos

Era evidente que el recuerdo la hizo gracia, ya que sonrió y se volvió hacia él para darle un apretón.

-No sé cómo me aguantas. ¿A las tres de la mañana? Me desperté muerta de hambre, como un tipo encerrado en un sótano y mi osito se levantó y me hizo huevos revueltos. Oh, Oh ¡mira eso!, rebotó de nuevo mientras miraba la silla con dosel. Es como un trono ¿verdad? Voy a sentarme ahí

-Ese es tu sitio, confirmó Eve

-¿Te puedo dar la mano, majestad?, preguntó Roarke

-Esto es TTF Too Total Frosty (totalmente demasiado helado) ¿Vas a salir corriendo a pasar el día con mi cariñito ¿verdad?

-Tan pronto como sea humanamente posible, la dijo, y la ayudó a acomodarse en la silla

-Bueno, está bien te doy permiso

-Dadle las cosas, susurró Peabody

-Podría empezar a llorar otra vez

-¿Y tengo regalos? ¿Ya? Como estaba sentada, lo mejor que pudo hacer Mavis fue mover el trasero ¿Qué? ¿Dónde? ¡Oh Dios! Me gustan los regalos

Inquieta por los resultados, Eve se acercó a un armario y sacó el cetro y la tiara

-¡Oh chico!. Genial al cuadrado

Aliviada porque en esta ocasión los ojos brillaban de risa y no de lágrimas, Eve le pasó la tiara a Leonardo

-Tú probablemente sabrás como hacer que queda derecha

-Coróname pastelito, le dijo Mavis Y que comiencen los juegos

A la hora, la sala estaba llena de estrógenos, Eve pensó que podría embotellarlo y venderlo en el mercado negro. Las mujeres picaban, bebían arrullaban el vientre sobresaliente de otras mujeres y charlaban sobre cosas, comprendió que hablaran cundo se reunían como especie.

Pelo. Se ve genial en ti, ¡y el color es genial! ¿Dónde vas?

Ropa. Unos zapatos absolutamente fabulosos ¿Son cómodos?

Los hombres. El simplemente no escucha lo que tengo que decir

Y debido a la naturaleza del evento, hablaron de bebés, bebés y más bebés. Lo nuevo que descubrió fue que las que ya habían tenido hijos insistían en compartir su experiencia del parto con las que tenían que pasar aún por ello

Dieciséis horas y dos y media de empujar. Pero valió la pena. Tatiana apareció tan pronto como rompí aguas. Si hubiera llegado diez minutos más tarde a la maternidad, ¡habría nacido en el coche!

A mí me atendió C Wiley no lo querría de nuevo

¡Debes conseguir la sinfonía de Magdelina Para dar Vida! Yo hubiera estado perdida sin ella. Tan poderosa

Los nacimientos en el agua, son el único camino a seguir. Yo tuve mis dos partos en el lago. Es una experiencia religiosa

Tomé los medicamentos

Y esa pensó Eve, fue la declaración más sensata del día

Con un Bellini helado en la mano, la periodista Nadine Frost- fría reportera y muy pronto presentadora de su propio programa sobre crímenes- se acercó. Es una buena fiesta Dallas, creo que jamás he visto a Mavis tan feliz. Ella literalmente está radiante

-Espera, podría empezar a berrear en cualquier momento

-Hormonas. Nadine se encogió de hombros. Llevaba su pelo rubio rodeándole la cara afilada. Quería hablar contigo

-El cabello genial. Los zapatos fantásticos y estoy segura que el hombre con el que estás actualmente es guapo e inteligente ¿Eso lo cubre todo?

-No, pero tienes tres de tres. Estamos afinando el formato de mi programa, y los productores y yo pensamos que sería el no va más hacerte un seguimiento mensual. Una hora más intensa cada cuatro semanas que no se centre solo en el caso en el que estamos trabajando, sino que de un resumen de en lo que has estado trabajando durante ese mes. Nadine levantó su copa de una especie de tostada antes de beber. Agrega un buen golpe al programa, y es una buena exposición, buenas relaciones públicas para el NYPSD

-¿Un seguimiento mensual?, déjame pensarlo un minuto. No

Nadine solo tomó un sorbo de su bebida levantando una ceja. -Que es exactamente lo que le dije a mi equipo que dirías. Así que tengo esta alternativa, que creo que se adapta a las dos. Un seguimiento mensual con homicidio. Alguien en tu división aparece cada cuatro semanas. Todo lo que tienes que hacer es asignar al detective, darme un mano a mano, para que pueda prepararlo. La pantalla es buena Dallas, y le da al público una cara

-Tal vez. La verdad era que tenía que tener un toma y daca con los medios de comunicación y a demás Eve sabía que podía confiar en que Nadine diera un punto de vista equilibrado. Algo así como que había que correr por el bronce

-Sigues estando la primera. Ella golpeó el hombro de Eve. En el que está trabajando ahora tiene una patada. Dos amantes jóvenes atractivos y aparentemente normales, los ataron, torturaron y mataron ¿Cómo te va?

-Eso es lo que me gusta de ti Nadine. Sabes cómo mantener conversaciones festivas

-¿Prefieres hablar sobre el parto y la lactancia?

-Prefiero ser apuñalada en el ojo con un palo ardiendo. Bien ¿Tienes algo sobre Walter Cavendish? Abogado rico

-No, pero puedo conseguirlo

-¿Y la fundación Bullock?

-Enorme, dona mucha pasta, programas de fondos, da subvenciones. Tiene base en Londres con alcance mundial y algunos intereses fuera del planeta. Ahora está dirigido por la viuda y segunda esposa de Bulock, la cual tiene cierta fama, y su hijo que no se separa de ella. ¿Pero qué tiene que ver la respetada y generosa fundación Bulock con dos contables muertos?

-Esa es la pregunta

Como vio que Peabody se acercaba corriendo se dio cuenta de que era la hora de regresar a Tierrabebe, y Eve cogió un Bellini

-Es la hora de los juegos, en los ojos de Peabody había un brillo que tanto podía ser debido a los Bellinis como a la sobredosis de estrógenos

-Adelante, le dijo Eve

-Nuh, no. Debes moderar tú los juegos. Si lo hago yo no podré jugar. Quiero jugar

Había dirigido operaciones, había dirigido una división de detectives. Podría manejarse con cien mujeres y un montón de juegos tontos

Era de locos. Eve los descubrió en los primeros quince minutos. La sala estaba llena de mujeres psicóticas y era demostrable

Gritando, chillando, riendo como los enfermos mentales en la carrera para descifrar cualquier indicación que ella les daba

No estaba segura de si no se vería obligada a someter a una morena que parecía que llevaba trillizos por lo grande que era

-¡Asalta cunas! Grito la mujer finalmente

-Bueno, bueno, ya lo tienes. Siéntate. Eve se presionó un dedo contra los ojos, respiró profundamente y oró para hacer lo mismo otras dos rondas sin convertirse en una idiota balbuceante

Al fin tuvo un respiro cuando la ganadora insistió en que la dejaran ir contoneándose a ver los premios y seleccionar su botín

-Dallas, desde su trono Mavis alzó la mano hacia Eve

-¿Necesitas algo? ¿Estás bien?

-Sí, estoy mejor que bien. Es solo que Tandy no está aquí. No sé que puede haber pasado. He tratado de localizarla en su casa y en su enlace de bolsillo, pero no contesta. Tal vez se ha puesto de parto, pero he probado en la maternidad y no la tienen registrada

-Tal vez se olvidó

-Simplemente no podría. La última vez que hablamos lo comentamos. Estoy algo preocupada

-No, una Mavis preocupada podía convertirse rápidamente en una Mavis llorosa. Oye estaba muy cerca de soltarlo ¿no? Tal vez solo está cansada o lo que sea. Apagó su enlace y está durmiendo la siesta. Prueba otra vez más tarde

-Sí, sí, claro está bien. Solo necesitaba descansar. No me gusta que falte ella. Es una ultra fiesta. Todo es realmente genial y ella estaba deseando que llegara el día

Cuando Mavis comenzó a sorber por la nariz, Eve se arrodilló junto a ella. Hey no te enfades. Vamos a apartar un poco de pastel para ella. Y uno de los regalos

-Eso estaría bien. Nunca voy a olvidar lo de hoy Dallas. No aunque viva un trillón y cinco

-Solo relájate y disfruta. Tengo que empezar la siguiente ronda

Mujeres enloqueciendo por los juegos le daban un poco menos de miedo que una emocionalmente herida, y muy golpeada Mavis

Eve consiguió pasar los juegos, y con Peabody como feliz voluntaria para entregar el botín, la fiesta pasó al siguiente punto del programa

Con la esperanza de distanciarse de los gorjeos y chillidos que estallaban cada vez que Mavis abría un regalo, Eve se dejó caer en una silla al otro lado de la habitación. Momentos más tarde Mira se unió a ella

-Toda una celebración

-¿Cómo puede estar tan emocionalmente cargada? , se preguntó Eve .Tenía miedo de necesitar mi equipo antimotines

-Los bebés, sobre todo cuando son tan queridos, llevan una alegría sin igual. Y para nosotras, para las mujeres que podemos o no optar por ellos, sabemos que somos las únicas capaces de traerlos al mundo. Nosotras somos el poder. Acarició la mano de Eve. Has hecho algo bonito por tu amiga

-No estaba segura de ser capaz de hacerlo. No estoy segura de si lo habría logrado si Peabody no hubiera manejado el látigo. Ha valido la pena

-¿Al igual que las dieciséis horas de parto?, dijo Mira con una sonrisa

-Oh Dios por qué, ¿Por qué se deleitan en hablar de todo eso? Es espeluznante

-Es el poder y el amor. Y cada experiencia es única. No importa la duración de la raza humana se ha propagado. Es íntimo y sorprendente y nos une como mujeres. Un día, cuando estés lista, lo sabrás

-Viendo todo esto y sabiendo la clase de parto que me espera, empujar, y empujar, la verdad es que es un concepto muy, muy bajo en mi lista de cosas por hacer

-Cuando estés lista, repitió Mira. Me gusta verlas. A las mujeres. Los diferentes tamaños y formas, los colores. La dinámica entre ellas. Mira a Luise y a Nadine, sentadas allí con las cabezas juntas. Y Trina la amiga de Mavis, se ha unido a las dos mujeres. Probablemente dándolas consejos sobre el pelo y sobre el cuidado de la piel en el embarazo. Y Peabody, llevando regalos a su, manera eficiente. Feliz de ser útil. Mavis en su trono, un concepto encantador por cierto, y con aspecto tan saludable y vital

-Y aquí estamos tu y yo, las observadoras. Mucho de eso, para mí, es como ver aliens. Aún así tienen su valor como entretenimiento, admitió Eve. Mira a la rubia de allí, con el vestido rojo. Sus pies la están matando. Pero la gente alabó sus zapatos. Y ella afirmó que eran muy cómodos. Ahora está atrapada. ¿Y la morena de pelo corto y falda verde? Sigue yendo a la mesa de la comida. Toma una pequeña porción de pastel cada vez. Lleva ya una docena de veces. Pero solo puede coger un trozo de pequeño tamaño. Ella misma dice que lo poco no cuenta

Cuando Mira se rio, Eve se relajó en un juego que sabía jugar

-¿Y Trina?, en primer lugar quiero dar gracias a Dios de que haya estado demasiado ocupada para estar encima de mí por mi pelo. Está captando clientes y no tiene sentido dejar pasar una oportunidad como esta. Pero al mismo tiempo, rara vez se aleja más de tres pasos de Mavis. La vigila. Le ha llevado gaseosa y un poco de tarta. Ha ido con ella cada vez que Mavis a echo uno de sus numerosos viajes a orinar

-Me dijo que tenía un nuevo producto, que cito”Saca del culo la sequedad del invierno”. Incluso me dio una muestra. Ah Mavis está a punto de abrir el regalo de Peabody. No puedo esperar para verlo

-Está nerviosa. Peabody, añadió Eve. Está de pie con miedo de que a Mavis no la guste tanto como ella esperaba. Dar regalos es una tortura

Pero cuando Mavis levantó la tapa, había una mirada aturdida en su cara, siguió un grito de asombro colectivo de los que estaban lo suficientemente cerca para ver el contenido

-¡Oh Peabody!

Y la alegría asombrada, casi reverente en la voz de Mavis le dijo a Eve que su compañera había dado en el centro de la diana

Ella sacó las botitas y el gorrito multicolor en tonos pastel A Eve le apreció que todas las mujeres en la sala eran pegajosas. Y cuando Mavis sacó la manta, hubo exclamaciones y dedos tratando de tocar

-Es hermoso, comentó Mira. Absolutamente encantador. Ella acaba de dar a Mavis algo para pasar a sus hijos

Evidentemente emocionada, Mavis se levantó de la silla para dar a Paebody un vertiginoso abrazo. Enrojecida y brillando, Peabody lo aceptó atentamente

-Ya que estás en ello, dijo Peabody ¿Quieres el último regalo que viene de tu anfitriona Dallas?

-Por Dios, esa es mi entrada. Eve puso su copa a un lado, y cruzó la habitación. Como Peabody las había descerebrado solo había una cosa que hacer. Eve sujetó uno de los bordes de la tela y Peaboy sujetó el otro. Cuando dejaron al descubierto la silla Mavis realmente se golpeó el corazón.

-Mierda, mierda. Es exactamente lo que yo quería. OH,OH mira los colores! Y he estado sentada en ella todo el tiempo. ¡Dallas!

Era el turno de Eve para recibir un fuerte abrazo.

-Es lo último en los sistemas de eje balancín. Es genial. No tenias que darme un regalo. La fiesta era suficiente

-Ahora me lo dices. Era la respuesta exacta para que Mavis riera en vez de llorar. Adelante, llévalo a dar una vuelta

Como no hubo heridos ni disminuidos, y no había habido catástrofes ni emergencias por nacimientos de bebés, y todas las caras estaban felices. Eve consideró que todo había sido un éxito.

También se imaginó a sí misma sumergida en una bañera de chorros calientes con un Bellini doble, hasta quedar en coma

-Los chicos están volviendo, anunció Peabody. Van a cargar con tus regalos Mavis. Leonardo McNab y yo conseguiremos subirlo todo a tu apartamento

–Te echaré una mano, le dijo Trina. La consultora de belleza llevaba hoy el pelo en un patrón de complicadas trenzas y rizos de un vistoso magenta. Posó los ojos en Eve. Necesitas un tratamiento

-No empieces conmigo. Estoy llena de alcohol y azúcar

-Lo has hecho bien .Te daré un respiro. Siéntate Mav, descansa un poco

-Estoy demasiado nerviosa. Casi no puedo esperar a que Leonardo eche un vistazo a todas estas cosas. Eres la mejor de las mejores, Dallas. Y ahora tengo que pedirte otra cosa

-¿Nos olvidamos de algo? Eve miró a su alrededor. No puede haber otro artículo de bebe en Manhattan

-No, se trata de Tandy. Aun no me ha contestado. Es como ahora. No puedo evitar imaginármela en su apartamento dando a luz. Quiero pasarme por allí ¿Vendrás conmigo por favor?

-Has tenido un día muy largo, le recordó Trina. Tienes que ir a casa y descansar

-No puedo. No hasta que me asegure que está bien. Realmente no tiene a nadie. Y yo…yo tengo mucho de todo

Notando un nuevo lloro, Eve intervino. –Seguro, no hay problema. Nos pasaremos por allí y luego te llevaré a casa

Lo que significaba un gran retraso para entrar en su estado de coma. Pero la llevó en el balancín que la había regalado fuera de la casa. Eso por supuesto significaba que ahora era la única responsable de una cansada y emocional mujer embarazada

-No tengas al bebé a en presencia, advirtió Eve mientras metía a su amiga en el coche

-Estoy bien, no te preocupes. Solo un poco cansada. Y sé que probablemente estoy siendo tonta sobre Tandy, pero no puedo evitarlo. Ella ha sido mi amiga desde hace un par de meses y hablé con ella hace un par de días. Todo era “no puedo esperar hasta el sábado” y hablaba de cómo había surgido este nuevo equipo para la fiesta. No se habría olvidado de ello Dallas

-Muy bien, así que vamos a ver como está. Si no está en casa, hablaremos con un par de sus vecinos. Si se puso de parto, alguno de ellos probablemente lo sabrá

-Claro, claro Puede ser que fuera a un centro diferente por alguna razón. Las parteras trabajan en más de uno. Eso es probablemente lo que sucede.¡ Waw, puede que ya tenga a su bebé!¡O que lo esté teniendo ahora! Mavis empezó a frotar su vientre. Yo podría ser la próxima

-Pero no hoy ¿De acuerdo? Miraba a Mavis recelosamente de reojo. Por supuesto que hoy no

-¡De ninguna manera! Quiero jugar con todos los regalos y colocar todas los trajecitos antes de que el pequeño Roofus o Apricot (Albaricoque) lleguen

-¿Roofus? ¿Apicot?

-Solo probaba que tal suenan

Eve miro a su amiga. -¿Quieres mi consejo? Sigue intentándolo