Sophie
Yo estaba más cómoda que estuve en los últimos dias. Abrí los ojos lentamente. La habitación estaba a oscuras más aún podía ver el contorno de las cosas.
- Hola – Ethan murmuró. Sus ojos se destacaban en la oscuridad y me hipnotizaban. Echaba mucho él. Me fui solo a unos pocos días, no sabia como ir hacia adelante.
- Hola - dije en voz baja.
- ¿Te sientes mejor?
- Sí, estoy bien. Me enfermo después de las inyecciones, pero unas horas más tarde, puedo mejorar. Creo que me quedé dormida.
- Te mire dormiendo, echava mucho eso.
- Ethan ... - dije sentado en la cama y tratando de alejarse de esa posición.
- Lo sé, te has ido, pero no puedo renunciar. Te echo de menos. Si pudiera volver atrás, yo nunca haría lo que hice para ustedes, pero yo no sé lo que puedo hacer para solucionarlo. Te quiero a mi lado, no durante 30 días, pero para siempre, ¿sabes? Me enamoré de ti ...
- Por favor, no digas eso, por favor ... - dije en voz baja.
Ethan levantó del lecho agitado. Él aun no me habia preguntado sobre lo que vio en el centro de la oncología y la sospechava de que, dependiendo de cuántas horas dormí, Max ha dicho todo.
- Ya sabes, ¿verdad?
- Max no me dijo, él dijo que era algo que tu deberías contarme. Pero no necesita ser un genio para saber que está enferma, usted está haciendo un tratamiento en un centro oncológico. ¿Por qué no me lo dijiste? - Sinti el dolor en la voz Ethan de no saber que pasaba. Max estaba extrañamente leal a pesar de ser hacerse de idiota.
- Tengo un tumor. Tomo la medicina y hago el tratamiento con inyecciones. Me deja débil, enferma... - Sé que parecía que estaba tratando de disuadirlo, pero quería que él supiera.Yo quería que él entiendesse que no podíamos estar juntos, que ahora yo era una bomba de relojería a punto de explotar.
- No me importa, maldita sea! ¿Sabes qué? - Se arrodilló frente a mí y podía ver todo lo que él quería decirme en sus ojos. ¿Por qué ahora me estoy muriendo, ¿por qué? - Pensaba usar usted, así que empecé a verte. Usted estaba sonriendo, feliz, y de repente ya no estaba. La señora me llamó cuando decidiste bailar porque le dije que serías la mía. Yo no quería que un idiota tuviera las manos sobre ti. Sé que era egoísta y usé mi dinero para manipularte, pero no me arrepiento. Sé que eres mía. Pensé que iba a matar a mi hambre de usted con un baile, un beso, pero quería más. No sé cómo sucedió, pero yo ...
No pude oír una y poner mi mano sobre sus labios, al silencio.
- No puedo Ethan, y tampoco tu.
- ¿Por qué?
- Porque me estoy muriendo. Tengo un tumor, y tengo un par de meses, y por eso me decidí hacer esto. ... Voy a morir - Sentí lágrimas formándose en mis ojos, pero las contuve.
- Sophie...
- Necesitaba dinero, y tu lo tenias. Tú eras el cupón de oro para pagar mi tratamiento, no debe ser más que eso.
- Sophie, no lo hagas. Yo no te creo. No es serio.
- Sólo tu ha dicho que se enamoró, yo nunca dije - mi corazón estaba latiendo 100 por hora con esta gran mentira. Yo no lo quiero cerca de mí cuando suceda, no quiero que el tenga otra novia muerta o alguien en estado vegetativo - Quiero ir a la casa de Wanda, me llevas o devo pedir un taxi?
- Te llevo, pero no termina aquí. Sólo porque usted dice eso no te dejare sola. Estoy preocupado, amor.
- Tengo que cuidar de mí, Ethan, y jugar a mí, no me va a ayudar.
- Yo te ayudaré - dijo abrazándome aún de rodillas delante de mí - ahora somos un equipo, y cuando esta pesadilla terminar, usted entenderá que siempre ha sido mi de la misma manera como yo era tuyo desde la primera vez.
Y luego me callé porque era demasiado egoísta para seguir mintiendo y preferí el silencio.
***
Ethan me llevo a casa de Wanda y de Allie temprano por la mañana, y me dirigi directamente hacia el sofá que llamava la cama. Si salia de la cirugía con vida, necesita un lugar mejor, lo que no sucedería aquí.
Las inyecciones dolorosas no son algo que se puede acostumbrar, pero decidi no dejar que me domine. Después de la primera vez, pretender que la fatiga y el dolor que hay no existe se volvió habitual. Todavía tenía que ir a los ensayos, tenía miedo de ser despedido de la companhia después de todo. Temí por mi futuro, si tuviera uno después de la cirugía.
En los próximos días llegaría a los temibles cuatro semanas y comenze a tomar inyecciones en un intervalo más corto, un paso final antes de la cirugía. Dr. Murray me llamó hace dos días y advirtió que tenía un día libre y que necesitaba verme. Todo podría cambiar.
Después de una ducha, tomé mi bolso de ballet y cuando crucé la puerta, vi a Ethan apoyado en coche esperándome.
- Ethan... tengo que ir.
- Lo sé. Clase de ballet, vamos.
- No, yo...
- Somos un equipo, te lo dije. Y eso incluye que te lleve y traiga el ballet. No quiero nada más, sólo tengo que ir con usted a lugares y ver si usted está bien y comiendo.
- Bueno - dije con recelo.
Él cumplió su papel y me dejó en la plática. Cuando me vio, a horas más tarde, él me preguntó:
- Usted puede hacer eso?
- ¿eso que?
- No es demasiado esfuerzo, no debe descansar o algo así? Te ves muy cansada y débil. La gente en su companhia no lo ve?
- Ven, peropara todas las personas, tengo un problema respiratorio que no me permite entrenar durante más de tres veces a la semana.
- ¿Y si pasa algo? Nadie sabe... Sophie…
- Es mi trabajo, quiero que respecte.
- No voy cuando pareces que un viento puede llevarte - parecía enojado, agarrando el volante con fuerza.
- Mi vida no es negociable.
- Pero yo estaba ... - luego murmuró un improperio - perdón, no debería.
-Te dije, Ethan, si me obstaculizar, prefiero que no hablamos más, sólo hace que sea más difícil.
- No voy a hacer, es que yo no entiendo.
- El baile es mi compañero desde la infancia. Cuando me siento triste, alegre, ansiosa... Yo siempre estoy bailando. Es lo que más me aterra esta enfermedad. No voy a dejar que me lleve hasta el momento que ya no sea sostenible, y no me preocupa su opinión.