La posibilidad del espionaje electrónico mediante detectores implantados en el cerebro de un general enemigo: tal es el tema sugerido por Dickson en esta novela, diez años antes de Watergate y las portentosas revelaciones sobre la CIA yanqui. Tenemos aquí otra muestra de la capacidad prospectiva de los escritores de ciencia ficción.

Pero la novela es mucho más que eso. El choque entre dos culturas, entre dos modos diferentes de entender la vida (no importa que uno de ellos sea el extraterrestre) jamás había sido analizado con tanta profundidad psicológica.

Nacido en 1923, el canadiense Gordon R. Dickson inicia su carrera literaria en 1950, escribiendo en colaboración con Poul Anderson. El tema de la guerra interplanetaria es de los que ha cultivado con más asiduidad, mereciendo el premio Hugo 1965 por Soldier ask not, perteneciente al ciclo de los Dorsai.