ARMANDO RAMÍREZ irrumpió en el mundo de la literatura a principios de los años setenta con Chin Chin el teporocho, novela que marcó un hito en la narrativa nacional por su desenfadado y crítico acercamiento a la vida en la ciudad de México y por su vigoroso retrato de las clases populares que en ella habitan. A esta primera obra le siguieron Violación en Polanco, Noche de califas, Tepito, Quinceañera, La Casa de los Ajolotes, entre otras. Algunos de sus trabajos han sido llevados con éxito al cine y al teatro. En conjunto, su obra narrativa tiene un sello inconfundible que se advierte en el uso del lenguaje y en el rescate de la vida y costumbres de cierto sector de la sociedad. Ramírez se ha desempeñado también como guionista, reportero y realizador de programas de televisión.