NOTA DEL AUTOR
AUNQUE esta novela está lejanamente inspirada en una antigua noticia —cuyos detalles debo agradecer a esa hemeroteca andante que es el periodista Juan García Luján—, todos los personajes, hechos y circunstancias descritos en ella pertenecen a la ficción y toda semejanza con la realidad es pura coincidencia.
Debo agradecer la inestimable colaboración de quienes leyeron La última tumba y contribuyeron con su opinión a mejorar notablemente el manuscrito: Nayra Pérez Hernández, Javier Doreste Zamora, Máximo González Guardia, Jokin Ibáñez, Gregori Dolz Kerrigan y, muy especialmente, Thalía Rodríguez, quien, además, soportó estoicamente mis pesadillas y me alentó durante el proceso de escritura desde la primera idea hasta la última palabra.
Las Palmas de Gran Canaria,
5 de agosto de 2012-2 de mayo de 2013.