10. Tipos de terapias de sanación

Terapia cognitiva conductual

Son terapias exitosas con niños, niñas y adolescentes abusados. La finalidad de este tipo de terapias cognitivas conductuales es que la víctima pueda:

  • Aflorar las vivencias que pueden estar reprimidas o negadas.
  • Reconocerlas como algo que le sucedió a ella o a él directamente.
  • Tomar el control personal y pasar de víctima a sobreviviente.

Son muy útiles porque, como hemos visto, en muchos casos las víctimas tienen pesadillas y otros efectos secundarios del trauma que poco a poco irán regulando. En la medida en que la víctima descubre que tiene herramientas personales para disciplinar sus reacciones emocionales acompañada de su terapeuta, recupera la confianza y la esperanza de sanar. La gran mayoría de los seres humanos, adultos y menores de edad, tenemos una inmensa capacidad para desarrollar herramientas de automonitoreo; con una buena asesoría y ejercicios de entrenamiento para la asertividad, el yo puede sanar y crecer espiritual y emocionalmente luego de la mala experiencia.

Dentro de esta terapia es usual que se utilicen técnicas de dibujo que permiten al terapeuta diagnosticar las emociones escondidas en la o el menor. Además ayudan a personalizar el tratamiento. El dibujo es muy útil en la infancia y no tanto en la adolescencia, porque en esta última etapa las personas ya pueden controlar la carga proyectiva y la natural inmediatez que una o un menor de 12 años todavía muestra sin siquiera pensarlo.

La terapia grupal es muy útil tanto para las familias como para las y los sobrevivientes en la segunda etapa de sanación. Dentro de los modelos de psicoterapia conductual, según la psicóloga Myriam Cacho, uno de los más reconocidos para víctimas de incesto es el desarrollado por los terapeutas Dettore y Fuligni. Consiste en tres etapas:

  • Facilitar la expresión de emociones y pensamientos concretos.
  • Incrementar las habilidades personales de copyng o enfrentar asertivamente.
  • Reparación de elementos cognitivos específicos y vivir la pérdida, el duelo y reconstrucción.

La terapia narrativa

Es una forma de terapia que se interesa fundamentalmente en las historias que la gente construye sobre su vida y su identidad. Un enfoque que ve los problemas como algo separado de la persona y supone que las personas tienen muchas habilidades, creencias, valores y compromisos que les pueden ayudar a cambiar su relación con los problemas.

En terapia narrativa se cuestionan los viejos valores del psicoanálisis que estigmatizan, por ejemplo, a una persona como «con una patología por violación». En narrativa se dirá que es una persona sana que vivió una violación y se atienden los efectos traumáticos sin estigmatizarla.

Los creadores de la terapia narrativa son el australiano Michael White y el neozelandés David Epston. En cuanto al trabajo directo con niñas y niños, se emplea una mezcla de terapia narrativa, arte terapia y terapia de juego en la que se incluye a madres y padres.

Es una terapia poco invasiva y altamente efectiva. Se ha demostrado útil con niños y niñas a quienes se catalogaba como beligerantes, hiperactivos, ansiosos o fuera de la realidad. Fueron capaces de examinar y reprimir su mal genio, controlar su frustración, afrontar sus miedos y emplear al máximo su imaginación. La terapia narrativa —una terapia realista, alentadora, pragmática y divertida— anima a los niños y a sus familias a utilizar recursos hasta ahora menospreciados para solucionar los problemas a los que deben enfrentarse.

Psicoterapia Gestalt

Se debe tener gran cautela cuando se habla de Gestalt. Una gran cantidad de personas no entrenadas adecuadamente organiza grupos de constelaciones familiares, que son parte de las técnicas gestálticas. He visto personalmente casos en los que, de manera irresponsable, charlatanes abren pasajes emocionales de asistentes a sus grupos. No solamente ignoran cómo manejarlos, sino también provocan un gran daño emocional al ignorar la crisis en la que pueden entrar las personas implicadas en la Constelación. Asegúrate, en todos los casos, de que las personas que te atienden estén debidamente certificadas, que te inspiren confianza y respondan a tus necesidades.

Dentro de la psicología humanista se halla la psicoterapia Gestalt, que recibe influencias de la filosofía existencial, de la metodología fenomenológica y de la psicología de la Gestalt.

Esta terapia se enfoca en la experiencia de la persona, enfatiza la responsabilidad y cualidades de cambio del ser humano. Se centra en los problemas y lo que significan para la persona. Su interés último es la dignidad y los valores humanos, está comprometida en el desarrollo del potencial de cada persona. Los motivos auténticos del modelo humanista van de acuerdo con el interior de la persona.

Esta concepción de la imagen humana fue desarrollada por Rogers, Maslow y otros. En ella se enfatiza el potencial personal de autotransformación, crecimiento y libertad, independientemente de las demandas biológicas o de la condición social. La psicoterapia Gestalt es más que una teoría de la psique: es un abordaje terapéutico eficaz que conduce a una filosofía de vida en la que lo fundamental es la conciencia (darse cuenta), la responsabilidad de los procesos en curso y la sabiduría del organismo para autorregularse, interactuando con el ambiente para mantener el equilibrio.

La iniciadora y principal exponente de las aplicaciones gestálticas en la infancia y la adolescencia es Violeta Oaklander. Su propuesta es un modelo de terapia dirigido al desarrollo saludable del niño o niña, al funcionamiento armónico de sus sentidos, cuerpo, emociones e inteligencia.

La niña o el niño abusado tiene que aprender a utilizar todos sus sentidos, primero para sobrevivir y después para aprender acerca de su mundo. La psicoterapia Gestalt busca que los pequeños logren expresar sus sentimientos con congruencia y descubran el lenguaje como un medio para expresar sus sentimientos, necesidades, pensamientos e ideas. Desde esta perspectiva, la sanación se puede lograr a través del desarrollo holístico constante y armónico de los sentidos, cuerpo, emociones e intelecto. Así, el niño o la niña que vivió abuso podrá confiar en sí y en su fuerza interior que le llevará a la autorrealización y a adquirir un sentido de ser en el mundo.

En el desarrollo infantil los patrones están en formación, el niño o la niña adquiere un sistema de creencias acerca de sí mismo que conformará un patrón introyectado de comportamiento y manejo emocional que le marcará de por vida. Este patrón se va perfilando a lo largo de las etapas de desarrollo. Según Erikson, el niño, al pasar por las etapas de transición, requiere una guía adecuada que lo ayude a superar la crisis que marca cada etapa. Si se brinda una guía adecuada, se permitirá al niño o la niña tener un desarrollo ininterrumpido y la expresión de su organismo completo en lo físico, emocional, intelectual y social.

El niño o la niña, paulatinamente, va logrando su autonomía física, posteriormente su autonomía emocional, con el lenguaje expresa sentimientos, necesidades y deseos, satisfaciendo por sí solo algunos de ellos; con el tiempo logra comprender el punto de vista de otra persona sin perder el propio; así diferencia sus pensamientos e ideas de los de los demás logrando su autonomía mental. Por último, se puede reconocer como un ser social; inmerso en el mundo de los demás empieza a probar y practicar con sus relaciones. Esta separación social lo lleva a establecer una relación segura y de confianza con los demás, ya que le permite comprender las características de estas interacciones.

Kundalini yoga

Es considerada la forma más completa y poderosa de yoga. Usa una combinación completa de ejercicios de respiración (pranayamas), movimiento, posturas especiales (asanas) y cantos (mantras). Sus efectos directos son:

  • Mejoría de autoestima.
  • Mejoría de circulación sanguínea.
  • Mejoría de postura.
  • Mejoría de capacidad respiratoria.
  • Obtención de flexibilidad en articulaciones.
  • Masaje en órganos internos.
  • Reducción del nivel de estrés.
  • Obtención de agilidad.
  • Calma y relajación.
  • Mejoría de capacidad de atención y aprendizaje.

Qi Gong

Qi Gong significa control de la energía, disciplina de la energía. El Qi Gong es una gimnasia energética china. Ayuda, a través de la filosofía taoísta, a restaurar, tonificar y vitalizar todo nuestro cuerpo y espíritu. El Qi Gong es parte de la medicina tradicional china desde hace al menos 2 000 años. En China y otros países ha demostrado tener un gran éxito en la recuperación del equilibrio físico y emocional en niños, niñas y personas adultas.

Su práctica está fundada en tres principios:

  • El control del movimiento, que debe ser natural, lento y tranquilo.
  • El control de la respiración, que debe ser lento y sincronizado con los gestos.
  • El control del pensamiento, que dirige el Chi, la respiración, el aliento, al interior del cuerpo.

Esta gimnasia está hecha de diferentes movimientos realizados en «cámara lenta», sin esfuerzos musculares, ni aceleraciones del corazón o la respiración. Al contrario, la respiración se disminuye. El Qi Gong incluye movimientos y posiciones del cuerpo (parado o inmóvil) o posiciones sentadas para ejercicio de relajación o visualización.

La práctica del Qi Gong logra en sobrevivientes de violencia una relajación del cuerpo, que a veces las palabras o la propia terapia psicológica no logran. Los movimientos son lentos, distendidos y ágiles. Esta relajación se profundiza con la respiración que disminuye. En ese estado, se siente el interior del cuerpo y se comunica al exterior, con la naturaleza. Se puede practicar:

  • Al aire libre con el fin de ofrecer una capacidad máxima de oxigenación del cuerpo en un ambiente de vegetación y naturaleza.
  • En grupo para aprovechar más las interacciones dinámicas entre los participantes.
  • A cualquier edad, desde la infancia hasta la vejez, pues los movimientos son suaves.

Con niñas y niños, el Qi Gong desarrolla el esquema corporal y el control del cuerpo, ayuda a mejorar la flexibilidad del cuerpo, relajarse y manejar el estrés. Permite un equilibrio psicosomático. El objetivo es alcanzar una sensación de bienestar y vitalidad. Mejora su atención y el aprendizaje de la concentración. Se logra alcanzar la paz interior y es notorio el avance en la sanación de los trastornos del sueño, alimenticios o de ansiedad. Logran desarrollar la suficiente confianza en sí mismos y se sienten libres de miedos y ansiedad. Por cientos de años las chinas y los chinos han utilizado estos ejercicios: respiración y atención interna para lograr una buena salud desde lo físico, lo emocional y lo mental.

Tai-Chi

El sistema de Tai-Chi para niños y niñas incluye 12 ejercicios adaptados a menores de 5 a 10 años, entre los que se encuentran movimientos que parecen pinturas en el aire. Los movimientos están dirigidos a mejorar distintos aspectos de la salud de infantes a través de respiración, visualización y concentración.

La respiración abdominal relaja el cuerpo y mejora el flujo de energía y oxígeno en las células. Los niños y las niñas en general visualizan la energía más fácilmente que las personas adultas y sienten su movimiento, color y temperatura de forma rápida.

Cuando logran sentirse como los animales que imitan, los movimientos se vuelven suaves y se sueltan las distintas tensiones en el cuerpo. Concentrarse en «ser» animal les ayuda a relajarse y focalizarse. Algunos movimientos son vigorosos y requieren coordinación y concentración. Se trabaja mucho con las piernas y los brazos, fortaleciendo los músculos.

En menores sobrevivientes de violencia, la recuperación del equilibrio está muy relacionada con la capacidad de concentración. Recuperar el equilibrio y la quietud en el cuerpo les ayuda a rescatarlo en el alma. Varios estudios pediátricos han demostrado que el Tai-Chi en la infancia aporta beneficios como habilidad para tranquilizarse, coordinación corporal, creatividad, energía positiva y mayor autoestima.

Tanto el Tai-Chi como el Qi Gong resultan extraordinarias terapias para menores con hiperactividad o depresión. La Asociación Nacional de Qi Gong de Estados Unidos ha trabajado durante 30 años con resultados asombrosos.

Reiki

El Reiki es un método de sanación natural que utiliza la energía vital universal, la cual ayuda a sanar enfermedades físicas y mentales. Reiki es una palabra formada por dos vocablos japoneses, Rei y Ki, que se refieren a dos formas de energía. Rei significa energía del universo. Todos los seres estamos conectados a esta forma de energía. Cuando fluye libremente a través de nosotros produce salud y bienestar. Ki es la energía vital que circula dentro del organismo de los seres vivos. Esta energía y la calidad de la misma son diferentes de un ser a otro.

El Reiki tiene un efecto equilibrante, armonizador y desbloqueador. Sensei Mikao Usui, creador del sistema que utiliza Reiki, demostró sus efectos positivos en personas con enfermedades físicas y emocionales. Quienes practican seriamente la técnica de Reiki experimentan profundos cambios en su vida y comienzan a sentir la armonización entre cuerpo y espíritu.

Primeros auxilios psicológicos

Una ayuda terapéutica breve y de urgencia, con tiempo limitado, es el tratamiento que se elige en situaciones de crisis. El proceso de ayuda para que las personas puedan recuperar el equilibrio después de un incidente crítico puede tomar de una a seis semanas. Puesto que la experiencia de crisis es un periodo de alto riesgo para la persona como para su familia, se requiere que la ayuda esté disponible de modo inmediato y en una ubicación de fácil acceso.

El psicólogo Juan Carlos García Ramos y sus colaboradores, en la ciudad de Santiago de Querétaro, México, nos ponen al día respecto a lo que significa la intervención en crisis y la terapia rápida. En la actualidad, la exigencia de ofrecer más y más servicios de salud mental ha llevado a las y los profesionales de la psicología a plantear nuevas formas de intervención, breves y rápidas, con el propósito de atender una demanda poblacional que se incrementa día a día. Considerando la escasez de personal competente para responder de manera inmediata una emergencia psicológica, se ha trabajado en la formación de personas que intervengan en momentos de crisis emocional.

Los primeros auxilios psicológicos han tenido un proceso conceptual evolutivo y construccionista de poco tiempo. En la ciudad de Santiago de Querétaro, Querétaro, desde 1995 se han compilado diversos materiales y experiencias donde se procura la formación de especialistas que ofrezcan una intervención urgente y un tratamiento corto a personas que pasen por una situación emocional crítica.

Las bondades del modelo propuesto le permiten ser utilizado, como primera ayuda emocional, por personas que no cuentan con una formación profesional en el área de la salud mental, esto es, por maestras y maestros, orientadores, personal del equipo de salud, madres o padres de familia y jóvenes líderes. El procedimiento de ayuda utilizado por este grupo poblacional tiene sus delimitaciones para proteger el mal uso del modelo y sólo se destacan elementos básicos para la primera ayuda emocional. Los primeros auxilios psicológicos deben darse luego de haber tomado un curso especializado.

Teorías de las crisis

La teoría está basada en los trabajos de Lindemann y Caplan y posteriormente fueron ampliados, desarrollados y modificados por L. Rapaport, N. Parad, D. Kaplan, Jacobson, M. Strickler y P. Sifneos. El modelo de intervención en crisis es planteado por Slaikeu y retomado por autores de la terapia cognitiva conductual de urgencia: Ruiz Sánchez, Imbernón González y Cano Sánchez.

Las aproximaciones teóricas de Lindemann permitieron desarrollar las técnicas de intervención en crisis, y se refieren al mantenimiento de la salud mental y a la prevención de la desorganización emocional.

Lindemann y Caplan precisaron los aspectos más importantes de la salud mental: el estado del yo, la etapa de maduración en la que se encuentre y la cualidad de su estructura de personalidad. Asimismo, afirman que para evaluar dichos aspectos del yo es necesario basarse en las siguientes áreas:

  • La capacidad de la persona para tolerar el estrés y la ansiedad, sin perder el equilibrio.
  • El grado que tiene la persona para reconocer la realidad y enfrentar los problemas.
  • El repertorio de mecanismos que tiene la persona y que mantienen su equilibrio biopsicosocial.

Una crisis es la respuesta a eventos peligrosos o amenazantes, y es vivida como un estado doloroso y de intenso sufrimiento. Es por esto que tiende a movilizar reacciones muy poderosas para ayudar a la persona a aliviar su malestar y a recuperar el equilibrio o la situación que existía antes del inicio de la crisis. Si esto sucede, la crisis puede ser superada y además la persona aprende a emplear nuevas reacciones adaptativas que le pueden servir en el futuro. Además, es posible que, al resolver la crisis, la persona madure a etapas superiores y se sienta con un mejor estado mental y emocional que el que tenía antes de la crisis.

La intervención realizada por un profesional de la salud mental puede ofrecer una ayuda inmediata, administrando la dosis de medicamentos correctos e iniciando un trabajo terapéutico de reajuste mental. Con el propósito de restablecer el equilibrio emocional, es necesaria una primera intervención, generalmente una terapia breve, cuyo principal objetivo es dar apoyo psicológico y ayudar a la persona en el preciso momento en que ésta lo requiera.

Este tipo de intervención se ha afinado gracias a los trabajos del Centro de Intervención en Crisis Emocional (CICE) en Querétaro, coordinado por el psicólogo Juan Carlos García Ramos. También existe un Centro de Intervención en Crisis en Jalisco, coordinado por el maestro José Francisco Gutiérrez Rodríguez. La Organización Mundial de la Salud y la Cruz Roja promueven los talleres de capacitación para que más gente tenga acceso a estas técnicas terapéuticas.

García Ramos propone dos etapas:

  • PRIMERA INTERVENCIÓN EN CRISIS: Primeros auxilios psicológicos
    • ¿Por cuánto tiempo? De minutos a horas.
    • ¿Por parte de quien? Padre o madre de familia, policía, clero, abogados, médicos, enfermeras, trabajadoras sociales, maestras, estudiantes líderes, supervisoras.
    • ¿Dónde? Ambiente informal: hospitales, iglesias, hogares, escuelas, lugar de trabajo, líneas telefónicas de urgencia.
    • ¿Cuáles son las metas? Restablecer el equilibrio, dar apoyo de contención, reducir la mortalidad. Rescate de eventualidades de riesgo y enlazar con recursos profesionales de ayuda.
  • SEGUNDA INTERVENCIÓN EN CRISIS: Terapia psicológica breve
    • ¿Por cuánto tiempo? De semanas a meses.
    • ¿Por parte de quien? Psicoterapeutas y orientadoras: psicología, psiquiatría, trabajo social, consejería pastoral, enfermería psiquiátrica, orientadoras vocacionales.
    • ¿Dónde? Ambiente formal: clínicas, centros de salud mental, centros de día, consultorios, oficina escolar.
    • ¿Cuáles son las metas? Resolver la crisis, reelaborar y recolocar el incidente de crisis. Ordenar el incidente en la trama de vida. Establecer la apertura/ disposición para afrontar el futuro.